Abrir un nuevo espacio renueva preguntas y expectativas.
Hoy las necesidades se manifiestan en volver a tener un lugar propio para la enseñanza, la investigación y la elaboración de proyectos. Siempre creí que al alumno de teatro hay que brindarle la posibilidad de un espacio adonde asista para aprender o experimentar, a traves de un recorrido donde confluyen la relación que vaya estableciendo con su profesor o guía, con los materiales de trabajo y sus compañeros y por supuesto, el lugar de trabajo. Para generar proyectos se necesita libertad. Por supuesto que no se trata de eludir formas, acuerdos, que se traducen en horarios, citas, encuentros, sino de comprender que los vínculos entre participantes de un espacio de aprendizaje deben empezar siendo productos de una necesidad compartida y fundamentalmente creativos.
Es mi intención darle al Club de Teatro El Jugador un abanico de propuestas. Habrá talleres de ACTUACION en diferentes modalidades y también le daremos lugar a la DIRECCION TEATRAL y a otras actividades afines, tanto prácticas como teóricas, procurando que no sean compartimentos independientes sino módulos interactivos, lo que le dará al espacio un marcado sesgo de producción teatral.
